LA TEOLOGÌA DEL DOMINIO DEL REINO | thebereancall.org

TBC Staff

Hay muchos factores que han producido la creciente apostasía y seducción de la iglesia. Uno de los errores más alarmantes, menos entendidos y de propagación más rápida, es la enseñanza de que esta tierra presente, en lugar del cielo, es el hogar definitivo para la iglesia. Por lo tanto, su objetivo es apoderarse del mundo y establecer el reino de Dios. Sólo entonces, se dice, Cristo pueda regresar, no para llevarnos a la casa de Su Padre, como prometió a Sus discípulos en Juan 14, sino para reinar sobre el Reino que ya habremos establecido para Él. Como mencionamos en el último capítulo de la publicación “La seducción del cristianismo”, si el verdadero Jesucristo va a llevarse a Su novia de la tierra para encontrarse con Él en el aire (1 Tesalonicenses 4:17), entonces aquellos que están trabajando para edificar un reino para un "Cristo" con quien se encontrarán, estando ellos en ésta tierra, indudablemente han estado bajo un gran delirio. En realidad, ¡han estado trabajando para el Anticristo! 

Se oye mucho acerca de que Cristo va a regresar solamente cuando la iglesia sea una novia unificada, vibrante, contundente, impecable, libre de arrugas, etc. No hay Escritura que respalde tal enseñanza. Tampoco es lógico, que los cristianos que estén vivos, cuando Cristo regrese, tengan que alcanzar la perfección para reunirse con Él (en ese matrimonio celestial con el Cordero), junto a millones de Cristianos de épocas pasadas que en absoluto, tampoco  alcanzaron tal perfección.

La única justicia que cualquiera de nosotros tiene es la de Cristo mismo. Nuestras obras nos califican para recompensas, pero no para ir al cielo. "Ausente del cuerpo... presente con el Señor" (2 Corintios 5:8) es tan cierto para los Cristianos carnales cuando mueren, como lo es para los más victoriosos. Cristianos de todas las edades "deben aparecer todos ante la sede del juicio de Cristo" (2 Corintios 5:10), y cuando nuestras obras hayan sido probadas con fuego (1 Corintios 3:13-15) y en vergüenza, habiendo confesado nuestros pecados y fracasos (1 Juan 1:9) y habiendo Él borrado "todas las lágrimas de  (nuestros) ojos" (Apocalipsis 21:4), entonces, y no hasta entonces, Su novia (la verdadera iglesia) aparecerá sin mancha ni arrugas, ¡unida ante el trono de su Padre en el cielo y lista para unirse a esa gran fiesta celestial!

Debemos procurar vivir vidas santas y fieles para Su gloria. Su venida, sin embargo, no depende de esa pequeña fracción de la iglesia que está viva en ese momento, alcanzando alguna forma de perfección que millones, y tal vez miles de millones, de cristianos que ya están en Su presencia a través de la muerte, sin haber nunca logrado tal perfección.

Esa enseñanza se remonta a varios siglos, pero su reciente explosión data del movimiento de la “Lluvia Tardía” o “Hijos Manifiestos de Dios”, que comenzó en 1948 en Canadá en un aparente renacimiento. Fue declarada una herejía por las Asambleas de Dios en 1950. Su relación con la “Palabra/Fe”, la confesión positiva, la prosperidad y los movimientos curativos (Hagin, Copeland, Capps, Price, etc.) está claramente establecida. Obviamente, si podríamos conseguir lo que confesemos, entonces deberíamos estar confesando la sanidad, la inmortalidad, la paz, la prosperidad y la salvación para el mundo. Este es, en realidad, de donde proviene el nombre "Hijos Manifiestos”, que indica que los vencedores de los  últimos días deben manifestar la victoria total sobre todos los enemigos, incluyendo la muerte, manteniendo los cuerpos presentes y sin resurrección.

Los miembros más radicales de los “Hijos Manifiestos” hacen tales declaraciones como: "Uno puede estudiar libros acerca de ir al cielo en el llamado “Rapto” si usted quiere. Pero nosotros queremos que usted estudie la Biblia para aprender a vivir, amar y a traer el cielo a la tierra". Otros son más cautelosos e incluso más astutos, en sus declaraciones. Uno de los primeros líderes, el difunto Conde Paulk, por ejemplo, afirmó creer en el Rapto a pesar que había escrito libros enteros denunciándolo. Así como los Mormones usan palabras como "salvación", "vida eterna", "Dios", etc. (ellos tienen su propio significado para estas palabras), de la misma manera los líderes de este movimiento utilizan una terminología que tiene diferente significado para otros cristianos con el fin de confundir. Para estos individuos es un error el suponer que por "Rapto" significa el arrebatamiento de los santos resucitados para encontrarse con Cristo en el aire y llevados al cielo. La mayoría de los que están en este movimiento utilizan el término "Rapto" para significar el alcanzar una nueva unidad con Cristo, que les permite manifestar plenamente Su poder y gloria.

Las Escrituras proféticas son negadas o interpretadas como si ya se hubieran cumplido (por ejemplo, gran parte de Apocalipsis ocurrió en el año 70 D.C.,      según los Preteristas y Amilenanialistas) o son espiritualizadas. Parte de la terminología que usan es: "La iglesia es Israel" y el verdadero Israel ya no tiene lugar en la profecía como nación; " Armagedón" es la batalla que ya está ocurriendo entre las fuerzas de la luz y la oscuridad; "El Anticristo" es un espíritu, no una persona; ya estamos en la Gran Tribulación y en el Milenio, etc. En lugar de adherirse a las Escrituras, según ellos, nuevas revelaciones se están manifestando. Estas "ideas espirituales" provienen de escuchar directamente a Dios (y se le denomina erróneamente "rhema"). Se nos dice que las nuevas revelaciones reemplazan lo que está escrito en Su Palabra. Además, el regreso de Cristo está siendo impedido por la indecisión del cuerpo de Cristo a aceptar esta nueva revelación. Aquellos que instituyen tales enseñanzas se presentan como una nueva clase de profetas que no pueden ser juzgados, sino que deben ser obedecidos. ¡De eso se trata la Nueva Reforma Apostólica!

Existen otros grupos que profesan creencias similares. La “Reconstrucción Cristiana”,  es un movimiento desarrollado dentro del Calvinismo que se asocia con la escatología “milenaria”, es decir, ahora estamos en el Milenio y nos adherimos a la teología de reemplazo (la iglesia ha reemplazado a Israel) y siguen el intento de Juan Calvino de traer el Reino a la tierra con su dominio absoluto sobre Ginebra. Lo mismo fue intentado en los Estados Unidos por la Coalición influenciada por el Calvinismo durante el renacimiento de la década de 1990. Se trataba principalmente de un movimiento político cristiano que involucraba la derecha religiosa y a la mayoría moral.  Jim Wallis de Sojourners, quien fue asesor espiritual del presidente Obama, es un principal defensor del Socialismo Cristiano, y su influencia sigue creciendo, especialmente entre aquellos que son celosos por el establecimiento mundial de justicia social, bajo el gobierno Cristiano. El objetivo de la izquierda Cristiana, también conocido como Cristianismo Progresista, se centra en limpiar la tierra de forma ecológica, política, económica, sociológica, lo que conduciría al dominio Cristiano. Ellos se imaginan que la función principal de la iglesia es restaurar el estado edénico, lo cual no ayudaría nada, ¡ya que fue en el Edén donde comenzó el pecado!

Muchos grupos están empezando a trabajar juntos aunque no estén de acuerdo en algunos puntos, como el grupo “Gaia” (Madre Tierra) los adoradores  de la “Nueva Era” en su deseo de limpiar nuestra “terra firma” y establecer el Reino. Podemos esperar que estos esfuerzos cooperativos crezcan, incluso involucrando a líderes cristianos que no están conscientes de lo que realmente están promoviendo. La “Coalición del Renacimiento”, por ejemplo, incluyó a evangélicos tan influyentes como Joseph Aldrich, Pat Robertson, Bill Bright, Jerry Falwell, Armin Gesswein, Josh McDowell y J. I. Packer, que probablemente no tenían ni idea de la real intención de los líderes de la “Coalición del Renacimiento”.  

Como se dijo al principio de este artículo, la participación involuntaria de uno en la construcción literal del Reino de Dios antes de la Segunda Venida del Rey mismo, Jesucristo, de hecho está contribuyendo al establecimiento de la religión y el reino del Anticristo. Esa será la próxima posición de Satanás al obtener la posesión de "el hombre del pecado, el hijo de la perdición" (2 Tesalonicenses) y que lo faculta para gobernar el mundo (aunque brevemente), mientras él, el jefe de los demonios, busca la adoración universal, que es su objetivo final para sí mismo.

Lo que se está presentando en ésta publicación es solamente algo parcial de los últimos cincuenta años de los esfuerzos de Satanás por edificar su reino demoníaco. Una visión anterior se da en un libro que reimprimimos titulado “Cristianismo y Anticristianismo en su conflicto final” por Samuel J. Andrews. Aunque fue escrito originalmente hace 120 años, su contenido revela gran parte de los engaños contemporáneos del Adversario.  Andrews simplemente miró lo que la Biblia declara que tendrá lugar en relación con la doctrina falsa, las profecías falsas, los falsos Cristos y las creencias y prácticas impías, y comparó esas cosas con lo que estaba ocurriendo en su época. Curiosamente, ¡el libro se lee como si hubiera sido escrito hoy en día! 

Yo (T. A. McMahon) tengo un profundo sentimiento para los jóvenes Cristianos. Mi gran gozo (3 Juan 1:4) es cuando puedo verlos "caminando en verdad". Mi dolor se produce cuando los veo demostrando mucho celo por servir al Señor, pero tal celo a veces es fomentado por la ignorancia bíblica y la enseñanza falsa. Hace unos años visité la iglesia de Bethel en Redding, California. El pastor es Bill Johnson. La iglesia tiene una escuela (La Escuela del Ministerio Sobrenatural) con capacidad para 3,000 estudiantes de todo el mundo. Antes del servicio, entrevisté a algunos de los estudiantes de tercer año. Luego asistí al servicio de la iglesia allí, y después uno de los estudiantes quien había entrevistado anteriormente me acompañó a un restaurante. Me preguntó qué pensaba del servicio, que fue predicado por el asistente de Johnson.

Le dije que me desconcertaba por un par de puntos importantes que el predicador había hecho: 1) que el renacimiento mundial es inminente, y 2) que Dios está levantando a Cristianos para transformar y gobernar la tierra antes de que Jesús pueda regresar y tomar control. El joven, un australiano, se sorprendió ante mi desconcierto acerca de esos dos puntos. Obviamente a él no le preocupaba, ya que eran enseñanzas claves de su educación en la Escuela del Ministerio Sobrenatural.

Mientras hablábamos, le pregunté cuál era su entendimiento con respecto a la escatología bíblica. Él no estaba familiarizado con el término, así que le dije que tenía que ver con los acontecimientos que tendrían lugar justo antes y después de la segunda venida de Jesús. Entonces le pregunté dónde encajaban los acontecimientos, como señaló el predicador de Bethel, con la cronología que la Biblia declara claramente, como la Apostasía, el Rapto, la Gran Tribulación y gran parte del Libro del Apocalipsis. No tuvo respuesta. La escatología bíblica no se enseña en la iglesia de Bethel ni en su escuela, porque no corresponde con la agenda del Dominio del Reino de Bill Johnson.

En publicaciones anteriores del “Llamamiento Bereano” mencionamos una   reunión de 40-50 mil jóvenes Cristianos en el “Estado Mundial de Campamento” (Camping World Stadium) en Orlando, Florida, en 2019. El evento de 12 horas se tituló “Los Enviados” (The Send). El objetivo declarado era motivar a los miles de jóvenes que asistieron a llevar el Evangelio a sus vecindarios, escuelas secundarias, universidades, comunidades, países y luego a las naciones en el extranjero. Sin embargo, pocos, si los hay, de los asistentes estaban al tanto del objetivo final de “Los Enviados”, el cual era el Dominio del Reino. 

Los líderes de la reunión de “Los Enviados”, eran todos defensores de los puntos Dominio del Reino, hechos por el predicador de la Iglesia Bethel. Los jóvenes oradores representaban a Bethel, a la Nueva Reformación Apostólica, y los otros directores también tenían ideas afines y eran muy influyentes. Los líderes “ancianos” que se dirigían a la multitud muy entusiasta, incluso hechizada, a la que asistieron Benny Hinn, Bill Johnson, Loren Cunningham, Lou Engel, Rodney Howard-Browne y Francis Chan. Todos son parte de los movimientos no bíblicos de la “Palabra/Fe,” “Confesión Positiva” y “Sanidad y Prosperidad” o al menos aliados de ellos.

Jesús caracterizó el tiempo de Su regreso diciendo a Sus discípulos: "Tened en cuenta que nadie os engañe" (Mateo 24:4). En Lucas 18:8, dijo: "... cuando venga el Hijo del hombre, ¿encontrará fe en la tierra?" Esta apostasía profetizada y el creciente engaño se ampliarán aún más "Porque vendrá tiempo cuando (muchos verdaderos Cristianos y aquellos que se profesan ser Cristianos) no sufrirán la sana doctrina, sino que teniendo comezón de oír, se amontonarán maestros conforme a sus propias concupiscencias, y apartarán de la verdad el oído y se volverán a las fábulas” (2 Timoteo 4:3-4). El apóstol Pablo advirtió a los ancianos de la iglesia en Éfeso de que aquellos que busquen pervertir su comunión, vendrían de adentro de sus filas: "Por tanto, mirad por vosotros, y por todo el rebaño en que el Espíritu Santo os ha puesto por obispos, para apacentar la iglesia del Señor, la cual él ganó por su propia sangre. Porque yo sé que después de mi partida entrarán en medio de vosotros lobos rapaces, que no perdonarán al rebaño. Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos. Por tanto, velad, acordándoos que por tres años, de noche y de día, no he cesado de amonestar con lágrimas a cada uno” (Hechos 20:28-31).

Pablo escribió a la iglesia de Corinto que no debemos ignorar las maquinaciones del diablo, para que no "obtenga una ventaja sobre nosotros" (2 Corintios 2:11). Una de sus artimañas es introducir "cosas perversas que desvían a los discípulos”, hacia aquellos que están promoviendo herejías. Algunos se identifican como los pioneros de lo que está “de moda” en el Cristianismo, como el “Movimiento de la Iglesia Emergente”, que ha ganado numerosos seguidores, especialmente entre los jóvenes adultos. Este movimiento practica e imita los rituales, liturgia y sacramentos de la iglesia Católica Romana, la iglesia Griega Ortodoxa y Altas Iglesias Episcopales. Algunos críticos declararon que era una moda efímera (algo que no duraría mucho) y que "no nos preocupáramos”. Lo que no reconocieron es que muchos de los movimientos de Satanás son a menudo similares a una gran ola que es impresionante a medida que sube la cresta, pero luego se estrella, extendiendo sus escombros (es decir, herejías) por toda la playa, donde quedan aspectos de sus falsas doctrinas, sólo para ser recogidos por otros. Pero no se detiene ahí. Las olas continúan viniendo. Se retiran y vuelven. Puede tomar un tiempo, y pueden ser modificadas a medida que se forman, sin embargo, muy probablemente volverán, tal como hemos visto en el resurgimiento del “Dominio del Reino” y las herejías de la “Palabra/Fe/Sanidad y Prosperidad.”

Entonces, ¿qué desearía el Señor que hiciéramos para enfrentar esta creciente apostasía? Ciertamente debemos crecer en discernimiento a través del hábito diario de estudiar Su Palabra, subrayando ese estudio con la oración sin cesar,   y la comunión con creyentes de ideas afines. Además, Jesús quiere que seamos vigilantes. Decenas de versículos nos exhortan a observar. Algunos de ellos tienen que ver con la expectativa de nuestra "bendita esperanza, la gloriosa aparición del gran Dios y nuestro Salvador Jesús Cristo" (Tito 2:13). Otros nos instan a estar atentos con respecto al mal que está aquí o que pronto viene sobre nosotros. Pero no es sólo para nosotros personalmente, sino es para todos aquellos que han sido atrapados o están a puntos para los engaños de Satanás. Así como al profeta Ezequiel (capítulos 3 y 33) se le dio la responsabilidad de ser vigilante sobre Israel, nosotros también somos responsables ante el Señor de informar a nuestros hermanos y hermanas en Cristo sobre los males de la apostasía.

No sólo se nos ha encargado el hacerlo, sino que la Palabra de Dios nos dice cómo hacerlo. "Porque el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar, sufrido;que con mansedumbre corrija a los que se oponen, por si quizá Dios les conceda que se arrepientan para conocer la verdad, y escapen del lazo del diablo, en que están cautivos a voluntad de él” (2 Timoteo 2:24-26).

TBC

LA TEOLOGÌA DEL DOMINIO DEL REINO  

Dave Hunt  y T.A. McMahon

Abril  2020   

KINGDOM DOMINION THEOLOGY

April 1, 2020

Dave Hunt and T. A. McMahon