Capítulo 16 - ¿Está la Salvación Disponible para Todos? | thebereancall.org

TBC Staff

Dios determinó por su propia voluntad el proveer la salvación. Él ideó el plan y establece las reglas para satisfacer su amor y justicia. Es una locura para cualquiera poder imaginar que el hombre puede establecer los requisitos para la salvación e imponérselos a Dios. No es menos evidente que Dios, por ser Dios, tiene la prerrogativa de ofrecer salvación a quien quiera. Aun así los calvinistas afirman que sus críticos niegan esta “libertad” a Dios. No lo hacemos.

Dios declaro, "y tendré misericordia del que tendré misericordia, y seré clemente para con el que seré clemente" (Éxodo 33:19). No dice, sin embargo, que él será Clemente y misericordioso a algunos y no a otros, sino que la gracia y la misericordia son por su iniciativa. No está bajo ninguna obligación de ser clemente y misericordioso para con nadie.

Sólo por la gracia y misericordia de Dios puede alguien ser salvo: "por gracia sois salvos... por medio de la fe…"(Efesios 2:8; Tito 3:5). Puesto que la salvación es por gracia, y no puede ser ganada, merecida o exigida sobre ninguna base.

Gracia y misericordia pueden ser entregadas a quien Dios decida darlas. Sin embargo, lejos de indicar que la gracia es limitada porque Dios ha decidido reservarla para un grupo selecto, la Biblia claramente declara que "de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su hijo unigénito para que todo aquel que en él cree, no se pierda más tenga vida eterna" (Juan 3:16 – 17). Cristo, el Cordero de Dios vino a "quitar el pecado del mundo” (Juan 1:29), y se convirtió en la propiciación por el pecado "por los de todo el mundo" (1 Juan 2:2).

Dios declara en repetidas ocasiones que él es clemente y misericordioso con todos. Y así es con el amor de Dios, de la cual fluye su gracia y misericordia — sin parcialidad y ofrecida a toda la humanidad.

Además, en contraste con los cientos de lugares donde el amor de Dios se expresa claramente para todo Israel (de los cuales la mayoría rechazó) y para todo el mundo (que también la mayoría rechaza), nada en la Biblia declara que Dios no ama y desea la salvación de todos. Ninguna escritura indica que el amor de Dios y la salvación están limitados a un número selecto. Si este fuera el caso, de seguro se podría afirmar claramente — pero no es así. En cambio, la gracia y misericordia de Dios se ofrecen en varias ocasiones a toda la humanidad.

Por lo tanto el calvinista intenta tomar cientos de declaraciones del amor de Dios para todos, e "interpretarlas" para decir lo contrario. Así que, en las expresiones del deseo de Dios para la oferta de salvación a todos, las palabras como "mundo" o "cualquiera" o "quien" o "pecadores" o "todos los hombres" son interpretadas en el sentido de "los elegidos".

Soberanía y Salvación

Dios de ninguna manera está obligado a proveer salvación para nadie. Sin embargo, la Biblia en repetidas ocasiones aclara que el propósito de Dios es para que toda la humanidad sea salva: "el cual quiere que todo los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad... Cristo Jesús... el cual se dio a sí mismo en rescate por todos... “(1 Timoteo 2:4-6). "Todo aquel que cree en él... Todo aquel que en él cree, que tome del agua de la vida gratuitamente"(Juan 3:16; Apocalipsis 22:17), etc… Las Escrituras no podrían declarar más claramente que la salvación es ofrecida a todos como un regalo de la gracia de Dios, para ser aceptada o rechazada.

Sin embargo no todos se salvan. ¿Por qué no, si el soberano Dios verdaderamente quiere que todos se salven? ¿Puede el Dios quien "hace todas las cosas según el designio de su voluntad" (Efesios 1:11) simplemente expresar su voluntad en una oferta que el hombre puede aceptar o rechazar?

¿Por qué no? De seguro que un mandato es más fuerte que una oferta y los diez mandamientos no son "diez sugerencias". Sin embargo esta declaración universal de su deseo para la humanidad, que Dios  dio desde el Monte Sinaí a Moisés y ha escrito en cada conciencia humana, es quebrantada miles de millones de veces al día por la propia voluntad rebelde del hombre. La soberanía de Dios no es más ni menos socavada porque algunos aceptan la oferta de la salvación y otros no, a como tampoco lo ha sido por el rechazo y la desobediencia continua del hombre de los diez mandamientos.

La palabra "cualquiera" se define en el nuevo Diccionario Universal Integral de Webster como “quien”; cualquier persona: una forma enfática. "No hay significados alternativos — siempre significa quien o cualquier persona. Sin embargo el Calvinismo exige que en ciertos lugares "quien" en realidad significa "solo los elegidos".

En verdad, el significado correcto para "cualquiera" contradice totalmente el Calvinismo. La palabra "cualquiera" (o quien) se encuentra 183 veces en 163 versículos de la Biblia, comenzando con "cualquiera que mate a Caín" (Génesis 4:15) y terminando con "el que quiera tome del agua de la vida gratuitamente" (Apocalipsis 22:17). "Todo aquel que/cualquiera" claramente significa que todos sin excepción. Se encuentra en las advertencias ("cualquiera que comiere leudado" — Éxodo 12:15) y en las promesas de recompensa ("el que primero hiera a los Jebuseos será cabeza y jefe" — 1 Crónicas 11:6). Entre las decenas de otros ejemplos están "todo aquel que lo oyere le retiñirán los oídos" (Jeremías 19:3) y "todo aquel que invocare el nombre de Jehová será salvo" (Joel:2:32). Ni una vez en sus 183 ocurrencias en la Biblia la palabra "quien" significa nada excepto "cualquiera". Pero en cualquier parte donde se ofrece salvación a todo aquel que cree y recibe a Cristo, el calvinista cambia la misma palabra hebrea o griega que significa “cualquiera” a los "elegidos".

Debe hacerlo con el fin de sostener el Calvinismo. ¿No es acaso la sumisión a la palabra de Dios  más importante que la lealtad a un dogma?

Cristo define “Todo aquel”

El verso más conocido de la Biblia promete vida eterna a "todo aquel que en él cree " (Juan 3:16). Las últimas palabras registradas de Cristo en las escrituras son, "Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente"(Apocalipsis 22:16– 17). No hay nada en estos pasajes o en cualquier otro contexto para sugerir que Cristo siempre ofrece la salvación a nadie menos que "todo aquel".

Sin embargo, la doctrina de la elección incondicional declara que esta oferta es efectiva para sólo un grupo selecto, que solo han sido elegidos incondicionalmente a la salvación — una reinterpretación de la voluntad de Dios claramente declarada que no tiene ninguna base excepto la necesidad de rescatar el Calvinismo.

En otras partes hemos demostrado que Cristo no dejo ninguna duda sobre el significado de "todo aquel" en Juan 3:16 en los versículos 14-15, comparó el ser levantado en la Cruz por nuestros pecados a las serpientes ardientes sobre los israelitas debido a su rebelión, y todos los que vieron la serpiente de bronce levantada por fe fueron sanados. Números 21:8-9 es inequívoco: "... y cualquiera que fuere mordido y mirare a ella, vivirá… y cuando una serpiente mordía a alguno, miraba a la serpiente de bronce, y vivía" 

La sanidad de la mordedura de serpiente venenosa no era para un grupo selecto dentro de Israel a quien Dios había predestinado para ser sanado, sino para "todo el mundo... cualquier hombre". La única limitación era mirar con fe a la serpiente levantada. Asimismo, todos los que ha sido mordidos por "esa serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás" (Apocalipsis 12:9) son sanados si ven por fe a Cristo, levantado en la Cruz. No es de extrañarse que los apologistas calvinistas, como James White, evitan los pasajes en el antiguo testamento que apuntan al sacrificio de Cristo por los pecados del mundo.

Las Escrituras claramente dicen que no hay "diferencia" entre judíos y gentiles, "todos pecaron... todo el mundo [es] culpable ante Dios" — y que Dios es el Dios "de los Gentiles", así como de los judíos. Por lo tanto la salvación es para "todos los creyentes" (Romanos 3:9-31).

Si la salvación no es realmente accesible a todos, ¿por qué Cristo envió a sus discípulos a ir por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura"(Marcos 16:15)? ¿No sería esto el dar una falsa impresión, tanto a sus discípulos como a todos los que habían leído el relato de las enseñanzas de Cristo en los cuatro evangelios? Cristo repetidamente ofreció salvación a todos los que creen y lo reciben: "El que oye mi palabra y cree al que me envió, tiene vida eterna" (Juan 5:24); "Si alguno tiene sed, venga a mí y beba" (7:37); "Yo soy la puerta... el que por mi entrare, será salvo" (John:10:7-9), y así sucesivamente.

¿Cómo pudieron sus discípulos, o la gente común que oyeron a Cristo y nunca habían oído hablar de las teorías de Agustín y de Calvino, llegar a la conclusión de que la salvación era sólo para un número limitado que había sido elegido incondicionalmente? Solo por el razonamiento complejo y un sistema de "Cinco Puntos" están obligados a llegar a esa conclusión. Y si ese fuera el caso, ¿no sería tergiversación de la peor manera ofrecer la salvación a todo aquel que quiera? Si fuera cierto el calvinismo, Cristo pudo haber elegido palabras más claras para transmitir ese hecho, más que solo ofrecer salvación a todo aquel que  cree en él y le recibe.

Por supuesto el calvinista explica que el predica el evangelio a todos porque no sabe quién está entre los elegidos. ¿Podría ser la voluntad de Dios predicar el evangelio a aquellos para los cuales no murió Cristo e instar a las multitudes a creer y que Dios les retiene la fe necesaria para hacerlo? ¿Acaso no es esto deshonesto y también cruel? Pedro dijo que los judíos se reunieron en Pentecostés, "porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos..." (Hechos 2:39). El calvinismo convierte esta promesa en una mentira y la predicación del Evangelio se convierte en un cruel engaño a las multitudes.

Ilustrando un Punto

El Dios de la Biblia declara repetidamente a lo largo de su palabra que él no quiere que nadie perezca, sino que su voluntad es para que "todos los hombres sean salvos" (1 Timoteo 2:4). Continuamente y en el lenguaje más urgente y solemne posible, llama a todos los hombres a arrepentirse y creer en su hijo como el Salvador de la humanidad. Cristo extiende sus manos con las marcas de clavos y declara, "Venid a mí, todos los que estéis trabajados y cargados y yo os haré descansar" (Mateo 11:28). Esta es una promesa para todos los que están cargados de pecado y tengan una razón para creer que la invitación se extiende a ellos.

Al creer en la Biblia, se debe concluir que al igual que "todos pecaron" (Romanos 3:23), por lo que se ofrece a todos liberación del pecado y su castigo por medio del Evangelio. Seguramente el "todo" en "todos nosotros nos descarriamos como ovejas" debe ser lo mismo que el "todo" en "más Jehová cargo en él el pecado de todos nosotros" (Isaías 53:6). Sin lugar a duda, todo Israel se descarrió. Por lo tanto, Cristo murió por los pecados de todo Israel. Ya que Israel es un cuadro de la relación que Dios desea para toda la humanidad, y puesto que "todos han pecado y están destituidos de la gloria de Dios" (Romanos 3:23), podemos estar seguros de que Dios puso sobre Cristo los pecados del mundo entero.  Como declaró Juan el Bautista: “He ahí el cordero de Dios, que quita el pecado del mundo” (Juan 1:29).

Al afirmar que "todos" y "mundo" significan sólo un selecto grupo, llamado "los elegidos" esto violenta el significado del lenguaje claro e impugna el carácter de Dios. En nuestro boletín, comparamos el Calvinismo al siguiente escenario:

¿Si yo sujeto una cuerda 10 metros por encima de un hombre en el fondo de un pozo y le suplicó encarecidamente sostenerse de él para sacarlo, no cree que me estaría burlando de él? ¿Y si, además, le reprendo por no tomar la cuerda, no cree usted que a él le gustaría tomarme a mí por la garganta? Y ¿Cómo podría explicarle a cualquier persona razonable que realmente quiero ayudar al hombre salir del pozo, pero él es el que no está dispuesto? Entonces, ¿Cómo puede Dios querer salvar a aquellos a quienes él no extiende la gracia irresistible, siendo el único medio por el que pueden creer en el Evangelio?

Entendiendo Mal una Ilustración Bíblica

En una discusión conmigo por la radio,[1]  James White respondió que el hombre en el fondo del pozo estaba muerto y no podía sujetar la cuerda. El punto de la Ilustración, sin embargo, no tenía nada que ver con tomar una cuerda. Ninguna ilustración es perfecta. La salvación no es por ningún esfuerzo por nuestra parte, ni tampoco por aferrarse a Cristo para ser salvo. Él nos mantiene seguros.

El punto era que la cuerda se sostuvo tan alto por encima del hombre en el pozo, que su supuesto salvador  no podía ser sincero. Es claro que el supuesto salvador, no está obligado a salvar al hombre que está en el fondo. Pero si él no desea salvarlo, ¿por qué se burla y riñe con el hombre en el fondo del pozo por no tomar la cuerda, mientras lo mantiene lejos de su alcance?

La falta de sinceridad de la oferta por el supuesto salvador era el punto de la ilustración imperfecta. Y así es con la oferta de nuestro Señor en cuanto a la salvación en la Biblia: el Calvinismo lo convierte en una oferta que parece extenderse a todos, pero en realidad no es así.

Tampoco ayuda pensar en el hombre dentro del pozo como un muerto. En ese caso, el supuesto salvador pretende llamar a un cadáver que sabe que no puede escucharle. Además, si el hombre en la parte superior tiene el poder para levantar al muerto a la vida y sacarlo a la seguridad, pero no lo hace, ¿cómo puede ser sincero en su oferta?

Tal es el Dios del Calvinismo: clama a los hombres que se arrepientan, envía a sus siervos a predicar un evangelio que parece ofrecer la salvación a toda persona y reprende y condena a aquellos que no creen, aunque Cristo no murió por ellos. Y aún rehúsa elegirlos a la salvación y no les da la fe esencial, sin la cual no pueden responder a sus plegarias. De hecho, que desde la eternidad pasada los tiene irrevocablemente condenados eternamente al lago de fuego.

Tal falta de sinceridad no puede explicarse con el ejemplo del alfarero y el barro. El hecho de que el alfarero puede hacer con la arcilla lo que él place no puede explicar la perfección prometida del alfarero a cada terrón de arcilla y luego descarta a muchos, aun la mayoría, sobre el montón de basura. Por supuesto, Dios soberanamente tiene el derecho de salvar a quien quiera y nadie puede quejarse. Pero su soberanía es sólo una parte de su ser. Dios es amor (es decir, el amor es la esencia misma de su carácter) y él es misericordioso a todos — exactamente lo que se espera de Él. Seguramente no esperaríamos que el “padre de misericordias y de toda Consolación” (2 Corintios 1:3) pueda  retener su misericordia de cualquiera que tan desesperadamente lo necesita — mucho menos que tome placer en hacerlo. Ciertamente, Dios está siendo tergiversado por aquellos que limitan su amor y misericordia y gracia a un número selecto.

“Todos los que estaban Ordenados para Vida Eterna”

Uno de los textos favoritos de prueba de los calvinistas es Hechos 13:48 — "y creyeron todos los que estaban ordenados para vida eterna" Vance, dice, "Cada calvinista, no importa qué otra cosa crea, utiliza este versículo para probar la elección incondicional..." Nettleton afirma que "este versículo es el que lo convirtió al calvinismo".[2]  White le dedica cuatro páginas.[3]  Palmer se regocija y dice, "aquí hay otro texto con una claridad asombrosa... La cruda sencillez de este texto es sorprendente".[4]

Ciertamente, "ordenados para vida eterna" es la traducción del griego de la palabra tasso (en este caso tetagmenoi) encontrado en todas las principales traducciones (como lo señala White).[5] Sin embargo un número de traducciones parafrasean este versículo, definitivamente, de una manera no calvinista. La Biblia Viviente dice,

"...como muchos que querían la vida eterna, creyeron " La Biblia Enfatizada de Róterdam dice: "todos cuanto habían sido dispuestos a la vida cumpliendo la edad... " La Traducción Nazarena 2000 por Mark Heber Miller, "...todos aquellos que creían estaban dispuestos a la vida eterna." Sea cual sea las opiniones divergentes de traductores y comentaristas, este versículo no puede deshacer lo que establecen otros cientos de textos.

El calvinista, para apoyar sus creencias, asume que tetagmenoi significa: "predestinado a la salvación". Sin embargo, no es ese el significado en cualquiera de los otros siete usos de tasso en el nuevo testamento. Si esa fuera la intención, ¿por qué se utilizó tasso y no prooridzo (predestinado)?

Por cierto, Adam Clarke siendo muy dogmático, declara que "Cualquier significado que pueda tener tetagmenoi, que es la palabra que traducimos “ordenado”, no incluye ninguna idea de pre-ordenación o predestinación de ningún tipo... De todos los significados que se le asignan, ninguno puede estar en peor acuerdo con su naturaleza y significado como la que representa la intención de aquellos que están pre-destinados a la vida eterna; Esta no es de ninguna relación al término y nunca debe aplicarse a él".[6]

Ni tampoco el contexto apoya la posición calvinista, como lo declaran numerosos comentarios. McGarvey, comenta que "el contexto no tiene ninguna alusión a algo como un llamado de una parte y un rechazo del otro, sino que el escritor dibuja una línea de distinción entre la conducta de ciertos Gentiles y de los judíos dirigidos por Pablo... Lucas dice, muchos de los Gentiles 'estaban ordenados' para la vida eterna. Es una actitud de la mente judía a la que Pablo está objetando y claramente es un acto de la mente de los Gentiles al que Lucas  pone en contraste con ellos... "[7]

Varias autoridades analizaron la palabra "ordenado" en la KJV de la corrupta Vulgata Latina, que, como señala T. E. Page, "tiene praeordinati, injustamente..."[8] El Comentario de Cook dice: "el A.V. [KJV] ha seguido la Vulgata.  Por lo contrario, [debería decir]... fueron dispuestos para la vida eterna, como en...Josefo..."[9] Asimismo Dean Alford lo tradujo, "como todos los que estaban dispuestos a la vida eterna creyeron".[10] El Testamento Expositivo del Griego dice, "No hay ningún permiso aquí para el decretum absolutum de los calvinistas".[11] Además A. T. Robertson dice: "la palabra ordenar no es la mejor traducción aquí. 'Designado,' como muestra Hacket, es mejor... No existe evidencia que Lucas tenía en mente un decretum absolutum... de salvación personal".[12]

Gramáticos del griego nos dicen que tetagemenoi, un participio nominativo caso tenso perfecto, voz media pasiva de tasso se utiliza, como el que indica una influencia sobre los Gentiles hacia la vida eterna y creer en el Evangelio. Que esto habla de una influencia presente y, como dice Barnes, "no un decreto eterno," así es aceptado generalmente. Al menos esta fue en parte la predicación persuasiva de Pablo — que encajaría en el contexto inmediato y todo el libro de Hechos: Pablo y Bernabé "Y hablaron de tal manera que creyó una gran multitud de judíos y asimismo de griegos. (Hechos 14:1)". El verbo... es medio... por lo tanto implica acción personal... entre aquellos que se ordenaron para vida eterna".[13]

Algunos afirman que los rollos del mar muerto, así como lo comentarios tempranos de los escritores de la iglesia, indican que los primeros 15 capítulos de Hechos probablemente fueron escritos primero en hebreo. El griego sería una traducción. Dicen los estudiosos que volver a una versión "hebrea redactada", basada en equivalentes de Griego-Hebreo palabra por palabra, Hechos 13:48  se debería leer más como "muchos que se sujetaron, o necesitaban, o querían salvación, fueron salvos." Además, si "ordenados" fuera el significado correcto, estos griegos todavía tendrían que creer en el Evangelio y aceptar a Cristo por un acto de su propia fe y voluntad, como lo dice toda la Escritura.

El Contexto es Claro

Salvación siempre es prometida a todos ("Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros" (Hechos 2:38) depende de la fe individual ("cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo" (Hechos 16:31).  Nunca hay una indicación de que Dios predestina ciertos elegidos al cielo, a quienes el regenera soberanamente y les causa irresistiblemente a creer en el evangelio, mientras que esa misma gracia es retenida de otros. Este texto sería una contradicción evidente del resto del libro de Hechos y de la Biblia, si el versículo 13:48 aludiera a que algunos gentiles, pero no judíos, fueron pre-ordenados por Dios para ir al cielo y que soberanamente se les dio fe a ellos para creer en el Evangelio.

El significado depende de: (1) comparaciones del uso de tasso en otros lugares y (2) el contexto. Aquí están todos los otros usos: “...al monte donde Jesús les había ordenado”. (Mateo: 28:16);"Porque yo también soy hombre puesto bajo autoridad"(Lucas 7:8); "...se dispuso que subiesen Pablo y Bernabé a Jerusalén" (Hechos 15:2); "...y allí se te ordenara todas las cosas que esta ordenado que hagas" (Hechos 22:10); "Y habiéndole señalado un día" (Hechos 28:23); "...por Dios han sido establecidas" (Romanos 13:1); "...se han dedicado al ministerio de los Santos (1 Corintios 16:15). En ninguno de estos otros usos en el Nuevo Testamento se relaciona, o llega a indicar un decreto divino que causa la acción humana.

El contexto es claro. En el versículo 46, Pablo le dice a los judíos, "puesto que la desecháis (el Evangelio)... nos volvemos a los gentiles". Esa fue su decisión personal. El versículo 48 presenta el contraste entre los judíos que habían rechazado el evangelio y los gentiles que creyeron. Esto fue una decisión personal de parte de los griegos, así como lo implica.  No hay base para la declaración calvinista de que la razón (de creer) es un decreto soberano.

Robertson comenta,

Los judíos aquí voluntariamente habían rechazado la palabra de Dios. Por otro lado estaban aquellos gentiles que aceptaron con mucho gusto lo que los judíos habían rechazado...  El por qué estos Gentiles  se pusieron del lado de Dios en contraposición a los judíos, Lucas no nos dice. Este versículo no resuelve este problema polémico de la soberanía divina y el libre albedrío.[14]

El significado exacto de tetagmenoi está en disputa. Sin embargo, este es el mejor texto que puede señalar el calvinista como apoyo a su doctrina. Y para ello, debe llegar a un significado cuestionable que contradice literalmente cientos de Escrituras donde el significado es tan claro como el cristal.

¿Predestinados para Salvación - o No?

Predestinación y elección son enseñanzas bíblicas — pero  nunca para alcanzar la salvación. Sin embargo para el calvinista, predestinación/elección  siempre y sólo es para la salvación — una visión que es impuesta injustamente a las Escrituras. Por cierto, la elección/predestinación siempre trata de las bendiciones específicas que acompañan la salvación, pero no se refiere a la salvación misma.

Pre-conocimiento siempre se usa como la razón de la predestinación (Romanos 8:29; 1 Pedro 1:2). Saber quién iba a creer el Evangelio es una razón valedera para elegir o predestinar a esas personas a ciertas bendiciones. Pero el conocimiento de Dios que extiende Gracia Irresistible a ciertas personas no puede ser ofrecido como la razón por hacerlo.

White tiene un capítulo entero titulado "Elección incondicional una Necesidad". Ciertamente, es una necesidad para el calvinismo, pero no así fuera de la base doctrinal calvinista. Para definir la elección incondicional, White no cita las Escrituras, sino la Confesión de Fe Bautista de Londres de 1689 Londres, y la Confesión De Fe De Westminster y un número de líderes calvinistas como James P. Boyce:

Antes de que el mundo fuese hecho, el propósito de Dios eterno, inmutable, originado en el Consejo secreto y según su beneplácito, lo movió a escoger (o elegir), en Cristo, algunos de la humanidad para la gloria eterna... (Confesión Bautista)   Este decreto... se hace "independiente" de todo pre-conocimiento de Dios de lo que sucederá en tiempo [y] predestina a ciertos individuos específicos a la vida eterna y otros los deja a la justicia. Esta es una elección para salvación y... es totalmente incondicional… de fe prevista, acciones, disposiciones o deseos. (Westminster) [Salvación está condicionada a la fe: "cree... y  serás salvo".] La última teoría [es decir, la teoría calvinista] es que Dios... de su propósito... desde la eternidad... decide  salvar... un numero definido de la humanidad (no toda la raza... no por.... su fe...), sino de su propia buena voluntad (simplemente porque le plació elegir). (Boyce) [15]

Estos son opiniones humanas falibles, que White y Boyce admiten expresamente como una simple "teoría" que debe ser probada por la Escritura. Más opiniones de hombres son citadas en el resto del capítulo de White. El final es de Calvino mismo:

 Nunca estaremos claramente persuadidos, como debemos serlo, que nuestra salvación fluye desde la fuente de la misericordia de Dios libremente hasta que llegamos a conocer su eterna elección, que ilumina la gracia de Dios por este contraste: que no adopta a todos indiscriminadamente a la esperanza de salvación, sino que le da a algunos, lo que niega a otros.[16]

Dando un Mal Nombre a Dios

Uno pensaría que en lugar de citar estas declaraciones, los calvinistas estarían avergonzados por hacerlo. ¿Cómo podría Dios retener la salvación de miles de millones a quienes Él podría dársela, y obligarnos a dar gracias por "la fuente de la libre misericordia de Dios " y por "iluminar la gracia de Dios de esta manera"? Eso sería como elogiar la generosidad de un hombre, por exponer su egoísmo.

En su capítulo sobre la "Expiación limitada", tras explicar que Cristo murió por sólo un grupo selecto y que todos los demás han sido condenados por Dios por la eternidad, John Piper y su equipo desafía toda lógica con esta declaración: "cada vez que se predica el evangelio a los incrédulos es la misericordia de Dios que da esta oportunidad para la salvación".[17] ¿Oportunidad para la salvación de aquellos por quienes Cristo no murió y que han sido predestinados a la condenación eterna? ¡Qué burla más insultante y cruel!

Lejos de glorificar a Dios, el Calvinismo da un mal nombre a Dios. Los ateos y otros críticos de la Biblia ridiculizan este retrato de Dios como un monstruo que se complace en imponer sufrimientos a la humanidad. El Dios de Calvino podría salvar a toda la raza humana — ¡pero sólo salva a unos pocos, supuestamente, para demostrar la grandeza de su gracia!

Este continuo énfasis en la soberanía de Dios a la exclusión de su amor, misericordia y gracia impregna el Calvinismo. En el folleto que publicó John Piper y su personal pastoral de la Iglesia Bautista Belén en Minneapolis, que promueve el calvinismo, carece del amor de Dios hacia los pecadores perdidos, mientras que el tema repetitivo dominante es la soberanía. En el prefacio, Piper escribe, "conocer a [Dios] en su soberanía es llegar a ser como un roble en el viento de la adversidad y la confusión".[18]  Pero totalmente desaparecido del folleto, es conocer el amor de Dios y amarlo.

El problema real es el amor de Dios y su carácter. El amor de Dios para el mundo no está presente en los Institutos de Calvino. Ciertamente, apenas se menciona el amor de Dios para cualquier persona, incluyendo el electo — notable contraste con la importancia que se le da al amor en la Biblia. En el calvinismo, no es el amor que trae salvación a la humanidad, pero la decisión soberana de Dios por su buena voluntad.

Dios espera que nosotros amemos a nuestros enemigos y que hagamos el bien a todos. Calvino admite que "Dios ordena que seamos misericordiosos incluso al indigno..."[19] ¿Tiene Dios un estándar menor para sí mismo? ¿Cómo podría glorificar a Dios el ser menos misericordioso de lo que ordena serlo a la humanidad? ¿Y dónde dice Dios que él limita su misericordia — y mucho menos que esto le glorifique de alguna manera?

La Escritura declara: "Bueno es Jehová para con todos" (Salmo 145:9), “y grande en misericordia para con todos los que te invocan” (Salmo 86:5), y la "Esperanza de todos los términos de la tierra, Y de los más remotos confines del mar" (Salmo 65:5). ¿Cómo puede Dios ser "bueno" a los que, según el calvinismo, predestinó al tormento eterno? ¿Cómo puede ser "abundante en misericordia" a aquellos a quienes él podría haber salvado pero no lo hace? Y ¿cómo puede el Dios de la salvación ser la "confianza" de los que él toma placer en condenar?

Calvino se refiere a "nuestro padre misericordioso",[20] pero limita  la misericordia de Dios solo a los elegidos.

Boyce ofende la conciencia de Dios, que es dada incluso a los ateos, en decir que Dios escogió salvar a muy pocos y dejar que los demás se pierdan, porque "Estaba satisfecho en elegir". ¿Dónde dice Dios alguna vez que está encantado en que alguien perezca? En realidad, en varias ocasiones afirma lo contrario — que no tiene ningún placer en que los impíos perezcan.

Una “Misericordia” y “Bondad” Extraña

La Confesión Bautista declara que la elección de Dios, que es supuestamente una manifestación de su misericordia, "predestina a ciertos individuos específicos a la vida eterna y otros los deja a la justicia". ¿Cómo puede ser una manifestación de misericordia el dejar a los condenados sufrir la pena que exige justicia, cuando podrían ser justificados y perdonados y rescatados del castigo eterno? Esto no es una cuestión de la culpabilidad de los pecadores, si merecen juicio o no, porque todos lo merecemos. La cuestión es misericordia. ¡Seguramente no puede haber un límite en la misericordia infinita del Dios infinito!

Dios advierte solemnemente al hombre, "Libra a los que son llevados a la muerte… ¿Acaso no lo entenderá el que pesa los corazones?... ¿Y (Dios) dará al hombre según sus obras?" (Proverbios 24:11– 12) ¡Todavía el Dios de Calvino no sólo rehúsa salvar a los perdidos, sino que sin piedad decreta su perdición! Esto no puede ser el Dios de la Biblia, del cual Jesús dijo, "Así no es la voluntad de vuestro Padre que está en los cielos, que se pierda uno de estos pequeños" (Mateo 18:14).

Estos "pequeños" se convierten en adultos. ¿Es entonces cuando Dios se complace en maldecir a muchos quienes antes eran pequeños? Pero la predestinación calvinista se refiere al tormento final incluso de niños.

Calvino declara, "Por lo tanto la prueba mayor de la escritura se toma uniformemente del carácter de quien es la palabra".[21]  ¿Cómo se atreve él a decir esto mientras pone en duda el carácter de Dios? Calvino luego pasa a elogiar la misericordia y la gracia de Dios como el pináculo de su carácter:

Hay ciertos pasajes que contienen más vívidas descripciones del carácter divino, poniéndolo ante nosotros... Moisés, ciertamente, parece haber pretendido comprender brevemente lo que puede ser conocido de Dios por el hombre, cuando dijo [en realidad Dios dijo], "¡Jehová! ¡Jehová! Fuerte, misericordiosos y piadoso; tardo para la ira, y grande en misericordia y verdad; que guarda misericordia a millares, que perdona la iniquidad, la rebelión y el pecado, y que de ningún modo tendrá por inocente al malvado..." (Éxodo 34: 6-7) En Jeremías, donde Dios proclama el carácter en que tendría que reconocerlo... es sustancialmente lo mismo... "Yo soy Jehová que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra..." (Jeremías 9:24)[22]

Sin embargo, en otros lugares Calvino afirma que la retención de Dios de su gracia, misericordia y amor de todos excepto los elegidos realza la bondad de su carácter. Por cierto, Pablo argumenta que Dios ha sentenciado "todo el mundo quede bajo el juicio..." (Romanos 3:19) y que  "Dios sujeto a todos (judíos y gentiles) en desobediencia, para tener misericordia de todos" (Romanos 11:32). Sin lugar a duda, todos son culpables y en incredulidad debe ser todo el mundo de los pecadores, judíos y Gentiles, los cuales son por naturaleza incrédulos y rebeldes — y éstos todos son los únicos a quien Dios ha decidido el tenerles misericordia. No podría ser más claro a través de las escrituras que la misericordia de Dios se extiende a todos.

Negando una Clara Contradicción

Como ya hemos visto, White nos informa, "¿Por qué un hombre es elevado a la vida eterna y el otro dejado a la destrucción eterna...? Es "según la intención bondadosa de su voluntad."[23]  ¡Así que es la bondad de Dios que maldice a tantos! ¡Esto nos ofende por nuestro Dios de amor!

Sin embargo el calvinista, niega cualquier contradicción con la idea de que el Dios de amor infinito se complace en predestinar billones al tormento eterno. Calvino incluso castiga a aquellos que reconocen que esto es una mentira. Alaba a Agustín por arrojar fuera de la iglesia a los que sugieren que Dios no puede realmente amar a los que ha predestinado al tormento eterno:

Se atreve alguien tratar a la gente así: Si no crees, la razón es, porque Dios ya te ha condenado a la destrucción: él no sólo fomenta la pereza, pero también vuelve sus rostros a la maldad. Si alguien dice, que aquellos que oyen no van a creer porque son reprobados [es decir, condenado por pre-ordenación de Dios], sería una maldición en lugar de una doctrina.  Por lo tanto, Agustín no sin merecerlo, ordena a estos maestros sin sentido o profetas de mal agüero y siniestros, a retirarse de la Iglesia.[24]

 Calvino está tratando de escapar a las consecuencias de sus propios dogmas, pero no puede. Insiste repetidamente a lo largo de sus Institutos que "Dios salva a quien quiere por su beneplácito voluntad"[25]  y que algunos son "pre-destinados a la salvación y otros a la destrucción".[26] Calvino  dice que a estos últimos: Dios ha “pre-destinados a la salvación y otros a la destrucción… quedan estos excluidos del acceso a la vida”[27] Y el hecho de que aquellos a quienes el Dios omnipotente ha "excluido del acceso a la vida" son responsables de su propio destino y también son los beneficiarios de su amor infinito es incomprensible.

Es como si Dios ha lanzado al océano miles de millones de personas a quienes ha creado para que no pueden nadar una sola brazada. "Afortunadamente" rescata algunos de ellos y deja el resto a ahogarse en la muerte eterna. ¿Cómo podría decirle a aquellos a quienes creó para ahogarse, "¡Esto es tu culpa!"? ¿Cómo Calvino (y los calvinistas de hoy) pueden decir es "maldad" y "maldición"  decir que los no elegidos no pueden creer en el Evangelio, porque Dios los ha excluido de la fe, cuando, en realidad, eso es exactamente lo que enseña el Calvinismo? Es indignante que sugieran que aquellos a quienes Dios predestina a perdición eterna no sólo son responsables de su destino, pero también son los objetos de su amor, misericordia y gracia. ¿Qué amor es este?

Gracia, Misericordia, y Bondad Bíblica

Toda la Escritura contradice la doctrina falsa de que Dios retiene su gracia de alguno. Por cierto, él es  "Dios que perdonas, clemente y piadoso, tardo para la ira, y grande en misericordia, porque no los abandonaste" (Nehemías 9:17). ¡Tales declaraciones son engañosas si Dios destinó a sólo un grupo de elegidos y predestino al resto (o simplemente dejo) al tormento eterno! Concerniente al hombre bueno y justo, la Biblia dice, "en todo tiempo tiene misericordia" (Salmo 37:26). Ciertamente el "Dios Clemente y misericordioso"(Nehemías 9:31) no sería siempre menos misericordioso con todos. Pero el Calvinismo limita la gracia y misericordia a un grupo selecto llamado los elegidos de Dios — Siendo esto un nivel inferior de misericordia que él espera de nosotros mismos.

El Apóstol Santiago señala la hipocresía de decirle a alguien que está "desnudo y tienen necesidad de la provisión de cada día y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de que aprovecha? (Santiago 2:15-16). Sin embargo, según el calvinismo, el mismo Dios que inspiró a Santiago, le dice a un mundo perdido y condenado, "cree en el Señor Jesucristo y serás salvo", pero les retiene la fe, para que ellos no puedan creer y ser salvos. Un Dios así ve a quienes están en mayor necesidad de algo físico e indigentes, y rehúsa rescatarlos de un infierno eterno, aunque en su omnipotencia podría hacerlo — y de hecho, él los ha predestinado a este horrible destino. ¿Es este el Dios de la Biblia o un Dios que Calvino tomo prestado de Agustín?

El Salmista se regocija en que "Bueno es Jehová para con todos, Y sus misericordias sobre todas sus obras" (Salmo 145:9). Sin embargo, el calvinista,  cambia las Escrituras para limitar la misericordia de Dios a "los elegidos". Cristo nos exhorta, " Sed, pues, misericordiosos, como también vuestro Padre es misericordioso" (Lucas 6:36). ¡Si nuestro Padre celestial es misericordioso a sólo los elegidos, nosotros podríamos descuidar el ayudar a multitudes y afirmar que esto también revela cuán misericordiosos somos!

Jesús ilustra la misericordia de su padre en muchas maneras. Nos dice esto después de clamar: "Dios, sé propicio a mí, pecador" (Lucas 18:13), el publicano misericordiosamente fue justificado. Pablo se refiere a "el Padre de las misericordias" y el Dios de toda Consolación (2 Corintios 1:3). ¿El "Padre de las misericordias", podría ser menos misericordioso que aquellos que Él espera lo sean hacia la humanidad?

"Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia" (Mateo 5:7).

Estas Escrituras y decenas más en el mismo tema, nos dicen que la misericordia de Dios es infinita, extendiéndose a toda la humanidad sin discriminación. El Salmista dice: “Las misericordias de Jehová cantaré perpetuamente"..." (Salmo 89:1). La misericordia de Dios es para todos los que le invocan. Ciertamente, la misma gloria de Dios está en su misericordia a toda la humanidad.

Por supuesto, Dios tiene el derecho de limitar su misericordia. Sin embargo, la escritura declara repetidas veces y de muchas maneras diferentes  que Dios no limita su misericordia sino que la extiende a todos. Uno se ve obligado a rechazar el Calvinismo sobre esta base única, porque contradice el carácter mismo de Dios que se muestra constantemente a lo largo de las Escrituras.

En cambio, el no-calvinista cree que Dios ofrece la salvación a todos, sin discriminación, pero no puede hacer creer a cualquiera, porque eso violaría su libre voluntad y elimina el amor. Quienes pasarán la eternidad en el lago de fuego, estarían allí por su propia decisión y no tendrían razón de culpar a Dios.

            El verdadero problema está en si Dios ama a todos y es misericordioso con todos y provee la salvación para que todos puedan aceptar o rechazar su provisión. La respuesta a esa pregunta será aún más clara para el lector en las páginas siguientes.

  1. Straight talk live (KPXQ, Phoenix AZ, 11 August 2000).  Compact Disc CD073, available through The Berean Call, P. O. Box 7019, Bend OR 97708.
  2. David Nettleton, Chosen to Salvation (Schaumburg, IL: Regular Baptist Press, 1983),

16; cited in Laurence M. Vance, the Other Side of Calvinism (Pensacola, FL: Vance Publications, rev. ed. 1999), 345.

  1. James R. White, the potter’s Freedom (Amityville, NY: Calvary Press Publishing, 2000), 186–90.
  2. Edwin H. Palmer, the five points of calvinism (Grand Rapids, MI: Baker Books, enlarged ed., 20th prtg. 1980) 29.
  3. White, potter’s, 187–88.
  4. Adam Clarke, Adam Clarke’s One-Volume Commentary (Cook Publications, 1989), 995.
  5. J. W. McGarvey, Commentary on Acts (Lexington, KY: Transylvania Printing and Publishing Co., 1863).
  6. T. E. Page, the Acts of the Apostles, Greek text with Explanatory Notes (New York: Macmillan and Co., 1897), 169.
  7. Frederic C. Cook, ed., the Bible Commentary (New York: Charles Scribner Sons, 1895).
  8. Henry Alford, the New testament for English Readers (Grand Rapids, MI: Baker Book House, 1983), I: 745.
  9. R. J. Knowling, the Acts of the Apostles, the Expositor’s Greek New testament ( Pennsylvania: Dodd, Mead and Co., 1900),  300.
  10. Archibald Thomas Robertson, Word pictures in the New testament (New York: Harper and Bros., 1930), III: 200.
  11. Acts, An introduction and Commentary, Tyndale New Testament Commentaries (Downer’s Grove, IL: InterVarsity Press, 1974), additional notes 110.
  12. Robertson, Word pictures.
  13. White, potter’s, 125–26.
  14. John Calvin, institutes of the Christian Religion. Trans. Henry Beveridge. (Grand Rapids, MI: Wm. B. Eerdmans, 1998 ed.)  III: 21:1.
  15. John Piper and Pastoral Staff, “TULIP: What We Believe about the Five Points of Calvinism: Position Paper of the Pastoral Staff” (Minneapolis, MN: Desiring God Ministries, 1997), 14.
  16. Ibid.
  17. Calvin, institutes, III: xx, 15.
  18. Ibid., 3.
  19. Ibid., iii, 4.
  20. Ibid., ii, 8, 2.
  21. White, potter’s, 177.
  22. Calvin, institutes, III: xxiii, 14.
  23. Ibid.,  xxi, 1.
  24. Ibid.
  25. Ibid., 7.